Los hallazgos del experimento sorprendieron a los neurólogos (pero, creo, que no habrían sorprendido a quienes, por masoquismo o curiosidad, han intentado alguna vez leer las opiniones políticas de los participantes en los foros virtuales de la prensa colombiana). Los experimentos mostraron que las áreas del cerebro comúnmente asociadas con el pensamiento racional (ubicadas en la corteza prefrontal) no incrementaron su actividad como resultado de la evidencia incriminante. Por el contrario, las áreas asociadas con la emoción (ubicadas en la corteza frontal y posterior) experimentaron un crecimiento sustancial en la actividad neuronal. Incluso varias áreas asociadas regularmente con el placer sexual entraron en efervescencia. Es como si los participantes sintieran una emoción súbita al rechazar la evidencia que contradice sus convicciones. Una especie de orgasmo mental que nubla la capacidad racional.
Estos hallazgos son coherentes con la evidencia recopilada, de tiempo atrás, por sicólogos y otros científicos sociales; evidencia que se podría denotar genéricamente como el sesgo de confirmación: la tendencia a rechazar irracionalmente los hechos que contradicen nuestras opiniones y a aceptar emocionalmente los datos que las confirman. Uno no necesita un IRM craneano para darse cuenta de que cuando el Senador Robledo rechaza algunas de las ventajas incuestionables del TLC no está usando la razón. O para intuir que cuando el Presidente Uribe insiste en que las exenciones a la reinversión de utilidades (el tema más polémico de la nueva reforma tributaria) son fundamentales para el crecimiento económico está apelando más a la emoción que a la razón. “Es posible superar estos sesgos”, dijo uno de los neurólogos que participaron en el experimento, “pero ello requiere una forma despiadada de la introspección. Uno tiene que ser capaz de decir ‘pues si…conozco bien lo que quiero creer pero tengo que ser honesto’”.
En últimas, los experimentos neurológicos insinúan que el hombre no es una animal que busca la verdad sino la complacencia ideológica. Desde este punto de vista, los políticos serían los más humanos de los hombres. Quizás de allí precisamente deviene su poder: la capacidad de convencer a los otros depende de la facilidad con la que se convencen a si mismos. En esta nueva visión, los políticos no son simuladores, sino creyentes. Actores enamorados de su guión. Seres de emociones y de sinrazón. Demasiado humanos, quizás. Para nuestro bien y para nuestro mal.
Juan Francisco
8 julio, 2006 at 10:49 pmAlgo que se podría considerar además es el efecto de la cultura política histórica en la identificación afectiva, en el aprendizaje emocional y en las formas de justificarlo desde los heurísticos personales, que se hacen estables desde la niñez y la adolescencia en la constitución final de la personalidad. Esto podría explicar por qué la gente relaciona sus creencias más privadas como las religiosas con determinados candidatos u orientaciones políticas, sin hablar necesariamente de argumentos. Es más, existen personas muy inteligentes y muy preparadas que parecen dar más importancia a estos elementos de identificación cultural que tienen tan arraigados en su personalidad y forma de ver el mundo, los cuales no discuten y sobre los cuales no reflexionan. Yo incluiría a varios del partido de la U y del gobierno en este grupo. En otro grupo tenemos a los que han validado aspectos ilegales de la cultura política sin reflexión moral debido a posibles trastornos de la personalidad que los hacen narcisistas, inescrupulosos y dependientes del logro social y del reconocimiento. Aquí estarían Germásn vargas lleras y cesar negret, y la mayoría de los casiques regionales que la cultura ilegal política ha fortalecido. Y en el tercer grupo está la población general que se orienta por el efecto de la publicidad política y del triunfalismo coyuntural en sus emociones y en las forma de justificarlas mediante heurísticos socialmente compartidos que no han sido replanteados, precisamente por la inadecuada forma en que se ha leído la historia política y se ha premiado irónicamente a quienes han tenido el poder político y económico, que forman parte de un grupo sociocultural excluyente, y que están centrados tanto en el mismo territorio como en las mismas costumbres. esto explica la razón por la cual los cambios políticos son tan lentos en Colombia. Por ejemplo, la reelección de uribe todavía tuvo que ver con la historia del Caguán y con la idea no argumentada que a pesar del clientelismo él es el único «capas» de acabar con la guerrilla. El pensamiento del bono de confianza y de la llamada estabilidad política o gobernabilidad a cualquier precio han seguido esta misma lógica social. El paternalismo no es raro al ver que las emociones son las que dirigen al electorado, sobre todo cuando lo más importante para el fortalecimiento institucional y de estado no es el presidente y ni siquiera la leyes que sean aprovadas, sino la congruencia social entre ley, moral y cultura. Yo diría que el cerebro político colombiano está enfermo, y su diagnóstico es conservaduritis aguditis. (conservador en el sentido cultural y no de partidos políticos).
Daniel Vaughan
8 julio, 2006 at 11:04 pmAlejandro, como siempre muy interesante su análisis. Sin embargo, esta vez me distancio de la lógica y las conclusiones derivadas de ésta.
En primer lugar, mi impresión es que cree usted fielmente en los resultados de una ciencia todavía bastante joven como la neurociencia. Probablemente ya los leyó, pero le recomiendo lo que algunos «neuroeconomistas» escribieron hace unos meses, y una respuesta igualmente controversial de los economistas del «mainstream». Las citas son Camerer, Colin F., George Loewenstein y Drazen Prelec. (2005), «Neuroeconomics: How neuroscience can inform economics.» Journal of Economic Literature. Vol. 34, No. 1.
Gul y Pesendorfer (2005), «The Case for Mindless Economics», mimeo, disponible en http://www.princeton.edu/~pesendor/mindless.pdf
Ahora en cuanto a los errores lógicos que encuentro en su argumentación:
1. Los sujetos que fueron sometidos al experimento son totalmente distintos a los que usa usted como ejemplo: el senador Robledo y el presidente Uribe. Y lo son, porque los sujetos en el experimento, como en la mayoría en aplicaciones de la neurociencia, fueron sometidos, dice usted, a imágenes claramente opuestas a la ideología que profesan, es decir, se rastreó la actividad cerebral, en momentos en donde las opiniones que tenían fueron sometidas a un juicio aparentemente inapelable. Muy distinta es la decisión (racional, digamos) y previamente meditada de Uribe o Robledo en el momento de hacer las declaraciones que usted menciona han hecho. No se si estoy siendo claro con mi argumento: los momentos son totalmente distintos: en el primero la persona, con unas creencias aparentemente bien fundamentadas, recibe evidencia de que contradice sus creencias, y en el segundo, las personas hacen declaraciones que han sido meditadas con antelación.
Creo que el problema es que usted quería argumentar que el senador Robledo y el presidente Uribe fueron víctimas de la pasión, en lugar de la razón, cuando hicieron las declaraciones, y es posible, lo único que estoy diciendo es que el experimento que usted menciona no tiene nada que ver con el punto que usted quiere argumentar.
Lo último que agregaría es que parece usted caer en la falacia de los economistas, que creemos que somos poseedores de la verdad. «¿Cómo es posible que el senador Robledo diga esto? ¡Tiene que estar siendo motivado por la pasión, porque lo que dice no tiene ninguna fundamentación!» o «Uribe claramente no pensó lo que dijo, o no lo consultó con un economista, porque es una barbaridad.»
Creo que como buen economista y analista que usted es, sabrá que los puntos que el senador y el presidente defendieron, probablemente de manera apasionada, es controversial dentro de la misma economía: hay puntos a favor, y puntos en contra, así que decir que lo que dijeron tuvo que haber sido motivado por la pasión del momento, sencillamente porque contradice (no lo sé) sus más fieles creencias como economista, definitivamente no significa que ellos estén mal (tampoco dice que usted está mal, por supuesto).
De todas formas, el artículo que usted comenta, y el punto central de su argumento son interesantes por sí mismos.
Un cordial saludo,
Daniel Vaughan
Nueva York, EEUU
zangano
9 julio, 2006 at 11:27 amel sentido comun es el menos comun de los sentidos,los hallazgos de las neuroimagenes ,demuestran que las creencias politicas ,economicas ,religiosas,ect, son eso, crencias,viene al caso citar la hipotesis, que propone que la mente crea la realidad del mundo en que se vive.
no solo los politicos sufren de sinrazon los academicos,cientificos,se aferran a sus hipotesis,llegan a ser profesores, creando una realidad cientifica,que requiere para que cambie, el retiro o la muerte de estos academicos. el cambio paradigmatico,o en lenguaje llano ,pensar,saliendose del cajon de creencias, en que uno se encierra,lleva tiempo y esfuerzo; todos somos humanos, los lobulos cerebrales emocionales nos rigen,sino, por que creen que colombia, esta como esta!
Anónimo
9 julio, 2006 at 12:57 pmEste articulo me hace pensar en un blogger que se hace llamar Jaime Ruiz. El la pasa escribiendo contra universitarios y profesores y me imagino que debe estar contento con las ultimas noticias:
http://eltiempo.terra.com.co/judi/2006-07-09/ARTICULO-WEB-_NOTA_INTERIOR-2995549.html
Para la muestra, Ruiz escribe: me parece el típico profesor de la Nacional: un asesino delirante que no sabe leer sino amenazar (…) Su sueldo se justifica porque manda matar al que incomoda, al mejor estilo universitario».
Anónimo
9 julio, 2006 at 1:50 pmBueno. Ahora ya sabemos entonces porqué Uribe acaba de nombrar a Samper en París, entra con una reforma tributaria en contra de su primer grupo elector y nos anuncia que Santofimio será en próximo Procurador.
Lo interesante ahora será ver cual es la racionalización de los Furibistas a estas perlas..
Anónimo
10 julio, 2006 at 8:07 amY qué del caso curioso del que tiene una fé irracional en la ciencia racional. Al que cualquier argumento no sustentado en la solidez lítica de los números le pone la corteza frontal y posterior a vibrar desaforadamente. Es posible argumentar de varias formas? Puede haber una irracionalidad por la racionalidad?
Jaime Ruiz
10 julio, 2006 at 3:04 pmPerdónenme por existir, pero me parece que al profesor Gaviria esto del blog le está resultando abrumador. Tal vez por lo tonto que es (lo de los blogs, claro). La vez pasada era algo que yo llamaría la «falacia de la intención» y que se podría aplicar a toda «interacción» humana de cualquier tipo en cualquier época. Ahora es lo del tipo de actividad cerebral: otra explicación de los argumentos por fuera de las palabras con que se exponen. Vamos a admitir (por pura vanidad obcecada, claro) ambos argumentos: por tanto, como en todas partes hay blogs y discusión política, el lector de otro país se encontrará algo parecido a la ristra de perlas que adornan los comentarios que se escriben a cualquier artículo sobre economía en El Tiempo, y cuando se trata de política en todas partes abundarán las maravillas que le dijeron al autor de un artículo sobre Corea del Norte en el mismo periódico. Salvo que se esté pensando en un patrimonio genético sui generis para los colombianos.
Aprovecho para contestarle al anónimo que me cita: todas esas personas que escriben esos comentarios tienen formación universitaria en Colombia. ¿Se puede negar que las universidades públicas se ocupan más de transmitir ideología que conocimientos? ¿Alguien recuerda que todo el CEC del PCC está formado por profesores universitarios?
Rehuir esa reflexión sobre el nivel y la orientación de las universidades puede ser el resultado de usar con acierto una función superior del cerebro (¡la que se encarga de la vida práctica!), y aun corresponder a una moralidad más rigurosa (bueno, la soberbia o la tozudez o la envidia son cualquier cosa menos «falacias lógicas»), pero puede que retrase una explicación precisa sobre lo que circula en los blogs.
¡O no, no, perdón, puede que no, puede que haya sido expuesta por los progresistas que escriben aquí una respuesta certera que demuestre cómo Morales encontrará una política eficiente para implantar un modelo parecido al sueco en Bolivia, pero por mi mal carácter que me hace sordo no he sido capaz de comprenderla!
Alejandro Gaviria
10 julio, 2006 at 6:23 pmJaime:
No estoy pensando en patrimonios genéticos sui generis de los colombianos. Aunque tampoco me gusta su tesis de nuestra perversión sociológica. Sólo he tratado de hacer algunos comentarios en defensa del pensamiento crítico. No lo hago con animo personalista, ni con intención descalificadora.
Creo que este tipo de paréntesis pueden ser útiles. Por ejemplo, en su discusión sobre las universidades públicas, no sería pertinente mencionar que la Universidad Nacional tiene más grupos de investigación reconocidos por Colciencias que cualquier otra universidad. O considerar las investigaciones medicas o biológicas de la Universidad de Antioquia. O ponderar los artículos publicados por el departamento de física de la Nacional. No basta, creo yo, con decir que los miembros del Comité Central del Partido Comunista son egresados de las universidades públicas y cerrar así la discusión de un portazo. Este tipo de omisiones no me abruman, pero sí me molestan pues poco contribuyen al pensamiento crítico.
Alejandro Gaviria
10 julio, 2006 at 6:34 pmDaniel:
Tu punto es válido. Pero no creo que los experimentos mencionados no tengan nada ver con las ideas de Robledo o de Uribe. Puse estos ejemplos no porque los señores en cuestión tengan opiniones distintas a la mías, sino porque sus opiniones parecen inmunes a todo tipo de evidencia. Son herméticas en el sentido de que están aisladas de toda prueba contraria. Y aquí vienen el punto del experimento: sus opiniones (emitidas de manera aparentemente racional y deliberada) se han formado (se han radicalizado,, podríamos decir) mediante un proceso sistemático de rechazo de las pruebas contrarias, tal como el que describe el experimento.
En suma, no creo que, al mencionar a los experimentos y a los políticos, estemos hablando de cosas distintas. Aunque, reconozco, que la generalización puede ser exagerada.
Pd: le estoy debiendo mis comentarios a su ensayo
Jaime Ruiz
10 julio, 2006 at 8:09 pmPerdón, por seguir: dos aclaraciones. Los líderes del PCC son profesores de universidades públicas. Los que son egresados o estudiantes son los que comentan en El Tiempo, que sólo parecen haber aprendido que la revolución socialista es la panacea y no hay que entender a los columnistas (sobre todo a los únicos que vale la pena leer, que son los que tratan temas económicos).
Las universidades públicas pueden tener logros, insignificantes si se piensa en lo que se gasta en ellas. Eso no quiere decir que no predomine el adoctrinamiento. El estudiante-egresado cree que se merece un sueldo por tener un diploma y que no tiene que dar ningún resultado, y ese diploma es el pretexto de un derecho anterior. Hace 200 años no hacía falta estudiar, se mandaba porque se nacía con derecho a ello. Claro, había que ir a misa. El unanimismo comunista de las universidades públicas es un atavismo. El tirapiedras está ejerciendo su mando sobre la masa de forma directa y se siente con derecho a ello, no porque sepa nada, sino porque pertenece a la universidad, y claro, al pueblo elegido que va a destruir a la oligarquía lacaya, etc.
Anónimo
11 julio, 2006 at 9:52 amJaime: De qué era la discusión originalmente? Muy bueno su punto ese de que el color verde de los blogs y su influencia en los profesores universitarios que se benefician de la regalías y por ende son comunistas porque se lo gastan todo en común por el bien de Evo Morales y los paramilitares que no entienden que el cerebro tiene varias partes entre ellas la del unanimismo atávico pero que rehuyen a las discusiones del color de los baños universitarios. Muy buena teoría. Celebremos su claridad mental
Anónimo
11 julio, 2006 at 11:09 amComo se nota que Jaime Ruiz no fue a la universidad. Pobrecito
sillogysmes_mao
11 julio, 2006 at 7:51 pmPOR SICOLOGOS Y OTROS CIENTIFICOS SOCIALES.Puede parecer paradojico,incluso inquietante,pero hay ‘investigadores’ con gran olfato politico donde laboratorio y billete de gran corporacion se concilian.En el sofisticado Disney del siglo XXI se sabe que la Ilustracion Cortesana se distrae en carruajes imperiales.La cuestion es: en que cultura politica el RATON de marras libero a los siervos de la gleba. ( ??? )
sillogysmes_mao
11 julio, 2006 at 8:12 pmCEREBRO POLITICO COLOMBIANO. Hay alguien en este Bolombolo que crea en la etica de mofarse de la hidroponia sueca y de las creencias mas privadas de los candidatos a defensores del modelito neoliberal de la vieja Chia ?. Son validas las excavaciones biblicas que suelen producir sacudidas en las tierras altas de los estratos academicos del sistema ???.
sillogysmes_mao
11 julio, 2006 at 8:36 pmLA PASION DEL MOMENTO. Digamoslo. Copiemoslo. La publicidad de Dunkin Donuts va dirigida a la clase trabajadora.Ahhhhhh… y es que el aprendizaje emocional de los de ruana encaja en los toques populistas de los analistas financieros.De pelicula,o no ?
Anónimo
12 julio, 2006 at 3:57 pmHola Alejandro; sin duda es muy convincente su columna y creo que cualquier persona sensata reconoce que la pasión esta detrás de los actos racionales. Pero usted pretende ubicarse en el equilibrio perfecto del pensamiento racional cuando su lógica está basada en un plano axiológico, de la misma forma que le ocurre al izquierdista, al conservador, al indio aymara y al economista de los Andes. Quizás las opiniones del senador Robledo (y también las del presidente Uribe) se fundamentan en unos valores diferentes al suyo. No soslaye el espirítu por defender el pensamiento racional y la digna pero arcillosa ética que usted preconiza
Anónimo
12 julio, 2006 at 4:17 pmNo son axiomas, es evidencia.
sillogysmes_mao
12 julio, 2006 at 6:12 pmEL MIGUELITO FANTASTICO Y LA PERVERSION PERIFERICA. Todos sabemos que la difusion popular del neoliberalismo tiene complicaciones politicas que afectan el desarrollo de la inteligencia.La mitologia Disney recoge esta evidencia.El exibicionismo del PAISA-PARACO se degrada en la violacion del projimo.Seria ridiculo lamentarlo.En la practica exigir grandes publicos lleva al descenso y al consumismo unanime.
sillogysmes_mao
12 julio, 2006 at 6:22 pmNI CON INTENCION DESCALIFICADORA.Lucha de clases a costa de una taza de cafe.Tres grandes cadenas redoblan sus esfuerzos para competir con Starbucks,que se ha hecho rica sirviendo cafe caro a aquellos que buscan un cierto lujo cotidiano.Dice Julie Bosman escribidora en el New York Times.
SILLOGYSMES_MAO
12 julio, 2006 at 6:35 pmOMISIONES QUE ABRUMAN. QUE FUE DE LA BUCOLICA RETORICA DE JUAN VALDEZ.( ??? ) ( SEPAN LOS LECTORES DE ESTE PAPIRO QUE NUESTRA TAREA ES LA DESTRUCCION,TERRIBLE,TOTAL,UNIVERSAL E IMPLACABLE DE LOS CATADORES DE CAFE ) ( ASI ES )
Anónimo
13 julio, 2006 at 2:49 pmDe Juan francisco
PAra Daniel Vaughan
Me parece muy interresante su argumento. Sin embargo creo que al comentar usted que no es lo mismo la respuesta cerebral ante imágenes inesperadas en los sujetos del experimento a las decisiones meditadas y planeadas del presidente, creo que sería interesante considerara el efecto multiplicador que genera un grupo social de referencia para sustentar una posición que puede no haberse argumentado por fcompleto racionalmente. Quienes vivimos en Colombia vemos todos los días medios de comunicación menos críticos y más permisivos con todo lo que afirma el presidente, con justificaciones no argumentadas sino de confianza en su persona. hay una gran cantidad de decisiones políticas históricas apresuradas y sesgadas debido al unanimismo que se da en un grupo que toma decisiones y ante la falta de críticas externas a este. Los experimentos de Solomón en Psicología Social sobre el Conformismo son famosos al respecto. Ahora, consideremos la cultura, que sería en este caso la estabilidad en el tiempo de costumbres y reglas sociales conformistas y acríticas. Es importante conozcan que las teorías contemporáneas sobre el cerebro rescatan la flexibilidad en el desarrollo filogenético y ontogenético que tienen las estructuras cerebrales y su funcionamiento con relación a la influencia que en ellas ejerce la cultura y la experiencia social. Hoy en día las posturas epistemológicas llevan a una integración de las ciencias sociales con las naturales, y recuerden, aunque no soy economista, que la economía es una ciencia social así se valga de la lógica mátemática y del pensamiento probabilístico, los cuales a su vez también son producto de la socialización y de premisas fundamentadas en principios filosóficos. Qué piensa de esto doctor gaviria?
Mirador de Medios
13 julio, 2006 at 3:07 pmEncuentre un análisis de la diplomacia de Uribe en el blogg «Observatorio de Medios», con casos reales de las pifias en la política exterior de este Gobierno.
sillogysmes_mao
13 julio, 2006 at 4:08 pmQuienes eran esos ‘anonimados cientologos said…’,y de donde surgieron?. Acaso leyeron a la pre-modernista y pacifica CANNABIS ?. Contra la explotacion infantil de la sicologia burguesa debemos afilar el morbo implacable de nuestro querido NECHAYEV. ( no se preocupen: a Lennin tambien le hubiera gustado algo de sierra nevada. )
sillogysmes_mao
13 julio, 2006 at 4:13 pm… Y si nuestro ladrilludo ANONYMUSS SAID… se transtoca en MOSAICO. ( ??? )
Jaime Ruiz
13 julio, 2006 at 6:00 pmEl anónimo de las 4:52 AM: La discusión trata de si en la discusión política están activas las partes del cerebro más aptas para las funciones analíticas, y mi comentario es simplemente que si eso fuera así en los demás países las discusiones también serían como los foros de El Tiempo, lo cual no ocurre. Por tanto, el problema es la ideología colombiana.
Todo lo demás remite a ese argumento, pero ¿para qué le voy a echar a perder su orgullo de no entender? Tal vez sea usted el mismo que escribe que se nota que yo no fui a la universidad: se nota que sí fue a una universidad colombiana, de ahí la enjundia de la argumentación. (Perdón por ponerlo a asociar demasiadas cosas, lo que lo hace a uno doctor es no poder hacerlo, los verdaderos genios son los que no pueden mascar chicle mientras caminan.)
John Bedoya
13 julio, 2006 at 7:52 pmMuy Buenos dias Alejandro¡
Felicitaciones por tan simpatica columna,no es sino escuchar tambien debates en el programa hora 20 para corroborar lo que dice el informe. Es muy complicado que se acepten posiciones del otro bando y pues en una lastima porque para mi como estudiante de Ciencia Politica no hay nada mas absurdo que la discusion de las izquierdas y las derechas, los extremos me parecen irracionales, pero bueno voy a lo mio. Alejandro me podrias ayudar para encontrar el estudio completo es que ingreso a la pagina de la revista y no lo encuentro.
MUCHAS GRACIAS
[email protected]
sillogysmes_mao
13 julio, 2006 at 7:56 pmYO NO FUI. Mister Chicle Light :
Cuando sucedieron ‘esas’ sospechosas ‘admisiones’ universitarias yo estaba revisando las utilitarias estrategemas del ideologo Marcelo Lippi. Asi es.
John Bedoya
13 julio, 2006 at 8:05 pmRetiro mi sugerencia , ya encontre el informe.
GRACIAS DE IGUAL MANERA
sillogysmes_mao
13 julio, 2006 at 8:15 pmCONTROL PANEL. Pensemos en el impacto que puede tener el regulado
Jaime Ruiz sobre nuestra » analizada» y filtrada IDEOLOGIA COLOMBIANA. Bienvenido, ( Recuerden: a la gente hay que creerle. )
zangano
14 julio, 2006 at 10:07 amsugiero que le hagan neuroimagenes a jaimito,seria muy entretenido ver cuales lobulos cerebrales,se energizan!
Doctor Shermer
14 julio, 2006 at 10:41 amMuy interesante el debate que tiene lugar en estas paginas. Con respecto a la ultima intervencion quisiera anotar que nuestros laboratorios han podido determinar con exactitud que a Jaimito se le estimulan el lobulo occipital, el lobulo parietal y el bloque central bolivar.
Juan Francisco
14 julio, 2006 at 2:36 pmSillogysmes, no se entiende absolutamente nada de lo que usted habla, no veo cual es la intención que usted tiene. Creo que usted hace que los que queremos aportar perdamos el interés en hacerlo.
Nonita
14 julio, 2006 at 3:49 pmQue buen post Alejandro, muchas gracias.
Libertario
23 julio, 2006 at 4:34 pmImportante recordar los nefastos resultados de las políticas basadas en el modelo del Estado de Bienestar. Los subsidios permanentes corrompen el espíritu humano de superación, lo que genera gran improductividad y de paso problemas fiscales. En EEUU durante los años 90 se cambió el sitema de beneficios y subsidios permanentes para madres solteras cabeza de familia, por un sistema que sólo daría apoyo por 24 meses. Esto incentivo la entrada de las madres al mercado laboral, que en últimas redujo significativamente la pobreza en ése sector poblacional y disminuyó el gasto del gobierno. Así entonces, el gobierno Uribe debería preocuparse por dar más oportunidades de emplo y talvez otorgar subsidios temporales, pero nunca deberá hacerlo de forma permanente y alcahueta.