Reflexiones

Orwell

 
 

Tomado de El león y el unicornio: el socialismo y el genio de Inglaterra (1941):

La mentalidad de la izquierda se puede estudiar en media docena de semanarios y de revistas mensuales. Lo que sorprende de inmediato en estas publicaciones es la actitud en general negativa, quejumbrosa, la completa falta de sugerencias constructivas. Contienen poco más que las críticas irresponsables de quienes nunca han ocupado ni esperan ocupar una posición de poder. Otro rasgo característico es la superficialidad emocional de quienes viven en un mundo hecho puramente de ideas y tienen un contacto muy escaso con la realidad física de las cosas.

Tomado de Rudyard Kipling (1942):

El gobernante debe enfrentarse siempre a una pregunta acuciante: ¿qué hacer en esta o aquella circunstancia? La oposición, por el contrario, no tiene la obligación de asumir ninguna responsabilidad ni tampoco tiene que tomar decisiones. Cuando existe una oposición permanente y acomodada, la calidad de su pensamiento se deteriora en consonancia. Además, quien comienza con una visión pesimista y reaccionaria de la vida termina siempre encontrando plena justificación en los hechos del mundo, pues la Utopía nunca se hace realidad.

Pronunciamiento sobre 1984 (1949):

El grave peligro es la aceptación del totalitarismo por intelectuales de todos los colores. La moraleja de esta pesadilla es simple: no permitan que ocurra, depende de ustedes.

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  • Anónimo
    12 febrero, 2014 at 4:28 am

    En parte, esto ejemplifica el no tan extraño fenómeno que puede observarse en elementos aparentemente extremos, contrarios: como la tal "izquierda" y la tal "derecha", por no involucrar a eso que podemos aludir por "centro" y demás variantes.

    Supongo que la resignación ha de tener un sabor similar a eso que llaman derrota. Y me siento triste por aquel o aquellos que, por su propia elección, han escogido conocer ese sabor resignado y a la vez como estático; sabor que espero difícilmente conocer.

  • Alejandro Gaviria
    12 febrero, 2014 at 12:46 pm

    Muchas veces el cambio social ha sido impulsado precisamente por aquellos que reconocen la complejidad de las cosas y aceptan, resignadamente digamos, que el reformismo democrático es la única vía. Los reaccionarios y los utopistas son, en últimas, parecidos, ambos logran lo mismo, el quietismo.

  • Anónimo
    12 febrero, 2014 at 1:06 pm

    O peor, el retroceso. Miren no más a Venezuela.

  • Anónimo
    12 febrero, 2014 at 8:33 pm

    Claro, esa es la excusa de todos los que están en el poder – sean de izquierda o de derecha-: "Yo tenía que hacer algo". Voy a colgarla al lado de "Yo sólo seguía órdenes". Forman una bonita pareja.

  • Anónimo
    13 febrero, 2014 at 3:23 am

    El ultimo comentarista es el típico seguidor de Robledo, quien denuncia la clase política y jamas fue capaz de denunciar a Samuel Moreno. Hipócritas.

  • Sebastián
    13 febrero, 2014 at 8:35 pm

    Como en un universo orwelliano, cerraron el canal de televisión NTN24 en Venezuela. Todo por transmitir las manifestaciones en contra de El Partido.

    Ahora sí es verdad que …

  • Alejandro Gaviria
    12 marzo, 2014 at 9:44 pm

    Triste ironía.

  • obat herbal asam urat
    19 junio, 2014 at 7:21 am

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  • obat herbal benjolan di leher
    29 junio, 2014 at 10:40 pm

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  • Lanark
    17 noviembre, 2014 at 3:19 pm

    A lo que algunos llaman "el cambio social" yo lo llamaría "el cambio social impuesto desde arriba". Mucha gente de ideología izquierdosa también cree sólo en el cambio social impuesto desde arriba (aunque digan otra cosa) y eso los vuelve el tipo de utopistas en permanente oposición que se menciona aquí. Si uno se dedica a ayudarle a la gente a organizarse, uno se vuelve más pragmático. Es una lástima que los moderados nunca hacen eso; untarse de pueblo se los dejan a los extremistas de izquierda y derecha que sí tienen los ánimos de funcionar por fuera de los conductos regulares.

  • Germán A Ome Bernal
    23 agosto, 2015 at 1:04 am

    No al extremismo. No a la radicalidad. No a las utopias. Hay q tomar decisiones y evaluarlas para ir corrigiendo el camino.

  • El Verosímil
    28 octubre, 2017 at 6:54 am

    Las extremismos no venden más que ideas de soluciones inmediatas, apuesto más por el reformismo laborioso del día a día, ya que las soluciones pasadas son los problemas del hoy.