Academia

Contra la extrapolación amarillista

La evaluación de los logros (y problemas) sociales necesita dos miradas: una cualitativa y otra cuantitativa; una etnográfica y otra estadística; una que enfatice lo particular y otra que resalte lo general. Los medios de comunicación usualmente prefieren la casuística alarmista, no están interesados en las tendencias generales. Presentan, además, cada historia, cada caso particular, como el resumen de una esencia, como la personificación de un problema generalizado. Extrapolación amarillista, digámoslo así.

Muchos incurren en lo que Daniel Kahneman llama el sesgo de disponibilidad. En Colombia hay más de un millón de actividades diarias en salud. Incluso si el porcentaje de casos problemáticos, de fallas del sistema, fuera ínfimo, de 0,1% o 0,01%, habría miles de historias trágicas que mostrar. Pero, como sugiere Kahneman, la disponibilidad no implica un empeoramiento. Y el mejoramiento puede coexistir con la disponibilidad de miles de casos problemáticos.

Por lo tanto, no está demás equilibrar la etnografía del desastre (tan común a nosotros) con algunas estadísticas. El Ministerio de Salud y Protección Social realiza cada año una encuesta para evaluar los servicios de salud. El universo de la encuesta son los residentes en Colombia mayores de 18 años, afiliados a los regímenes Contributivo y Subsidiado y usuarios de los servicios de salud durante los seis meses previos a la recolección de los datos (que tuvo lugar en noviembre y diciembre de 2014). La muestra supera las 20 mil encuestas, en 85 municipios y 32 departamentos, que representan, en conjunto, 22 millones de usuarios de las EPS.

 
 
El primer gráfico muestra que el porcentaje de usuarios que deben recurrir a una tutela para acceder a algún servicio de salud es cercano a 1%. Contrario a lo que se dice y escribe corrientemente, la tutela es la excepción, no la regla. El sesgo de disponibilidad puede distorsionar las percepciones. La etnografía del desastre conduce con frecuencia a conclusiones equivocadas.
 
 
El segundo gráfico muestra que más de 70% de los usuarios considera que la respuesta dada por las EPS a sus necesidades de atención en salud es buena o muy buena. Un porcentaje no despreciable opina lo contrario, cabe reconocerlo. Pero las cifras contradicen la idea (bastante difundida) de un sistema de salud fracasado. O incapaz de responder a las demandas colectivas.    
 
 

El tercer gráfico toca un punto álgido, la negación de servicios. Aproximadamente 5% de los usuarios reportan que, por alguna razón, les fue negado un servicio de salud. El porcentaje es preocupante. No invita a la complacencia. Pero (nuevamente) la negación de servicios es la excepción, no la regla. No estamos, como piensan muchos, ante un fracaso sin atenuantes.

Las estadísticas no son la última palabra. Pero son necesarias para contrarrestar las generalizaciones equivocadas, la inducción ligera (o perezosa) que lleva a algunos  periodistas a confundir casi a diario lo particular con lo general.

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  • Anónimo
    28 febrero, 2015 at 11:03 pm

    Saben en la w que es estadística? No. Saben que es rating? Si:

  • Anónimo
    28 febrero, 2015 at 11:12 pm

    Muy buena columna Alejandro. Todo el apoyo.

    También está aquello de la posibilidad de identificar la "tragedia", de ponerle una cara. "people pay greater attention and have stronger emotional reactions to vivid rather than pallid information"
    http://csi.gsb.stanford.edu/increase-charitable-donations-appeal-heart

    Mateo U.

  • santiago puerta
    1 marzo, 2015 at 1:32 pm

    Excelente escrito ministro ojala sea "entendido" por nuestros comunicadores en toda su dimension y no solo publiquen los porcentajes de problemas. Seria interesante que en el ministerio se crearan programas qye ayuden a la IPS visibilizar aquellos miles de casos de exito fruto del esfuerzo y expertisia de nuestro recurso humano en salud. Es no menos importante que aquellas EPS exitosas con sus programas de riesgo y planeacion financiera estan haciendo la cosas bien sean mostradas a la sociedad. Recomiendo este bloghttp://theincidentaleconomist.com/wordpress/tag/value-based-design/

  • Anónimo
    1 marzo, 2015 at 6:32 pm

    Así es.Un balance adecuado entre la información cualitativa y la cuantitativa es lo que permite ver tanto en contexto como en lo particular los avances y retrocesos del SGSSS. No es con 'columnas de opinión' amañadas y sesgadas con el único fin de buscar protagonismo.

  • Luis Jorge Hernandez Florez
    1 marzo, 2015 at 8:11 pm

    El problema de la Salud no es estadístico ni de frecuencias bajas. Una sola mortalidad infantil cuenta. En epidemiologia hace años se sabe que las causas de la incidencia poblacional son diferentes a las incidencias individuales. El problema no es de probabilidad sino real. Los culpables no son los medios de comunicación, ellos son solo notarios de nuestra historia diaria.

  • Anónimo
    1 marzo, 2015 at 8:14 pm

    Desafortunadamente a los amarillistas (trátese de periodistas, políticos o ideólogos de cualquier color) no les interesan las tendencias sino el incidente particular: la causuística que les permite señalar con el dedo; la prueba para ellos contundente; ese instante mágico de superioridad moral; esa denuncia inapelable.

  • Anónimo
    1 marzo, 2015 at 9:58 pm

    Decir que el problema no es de probabilidad es borrar de un plumazo (o dedazo) toda la epidemiología. De todo se ve en este país de ignorantes. Lo de Luis Jorge es penoso. Vergonzoso. Casi analfabeta.

    • ADRIANA SEGURA VÁSQUEZ
      4 marzo, 2015 at 11:22 pm

      La epidemiologia tiene varias vertientes y Luis Jorge no es en absoluto un pintado en la pared en este tema. Efectivamente, no es lo mismo estadística que epidemiologia. En cuanto al periodismo, la mirada crítica de los medios proporciona oportunidades de aprendizaje a todo funcionario público que desee trabajar bien por la gente, más allá de descrestar. Este tema no está en blanco y negro. Escuchemos con respeto y sin juicios a priori.

  • Eduardo Guerrero
    2 marzo, 2015 at 12:29 am

    Este articulo es discutible y no se puede tener esta visión con la protección de la vida y la calidad de los servicios de salud.

  • Anónimo
    2 marzo, 2015 at 1:28 am

    Eduardo: entiendo que no le guste el artículo y veo también que no tiene muchas razones o argumentos para refutarlo.

  • Charlesaznabur
    2 marzo, 2015 at 12:37 pm

    6 mil personas mal atendidas que extrapolando la encuesta son casi 15 millones de personas es una cifra muy muy grave. Adicionalmente que estas encuestas las hacen con la informacion de las EPS. que tal esta cosificacion de la vida!!!!

  • Alejandro Gaviria
    2 marzo, 2015 at 1:09 pm

    Las encuestas no se hace con información de las EPS. Son encuestas domiciliarias. Otra crítica basada en el desconocimiento.

    • Robinson camacho grimaldos
      18 julio, 2015 at 8:51 pm

      Informen bien como fue la muestra, cuantos enfermos, cuantos sanos, como fue la seleccion para saber que no hay sesgos. Esos estudios de entrevistas domiciliarias son los mas sesgados

  • Sandra Rozo
    2 marzo, 2015 at 1:32 pm

    Algo más para reflexionar, que porcentaje de ese millón de actividades diarias en salud son de PYP o de detección temprana? Los encuestados son personas que están en los servicios de salud, seguramente (apreciación personal) por actividades resolutivas.
    Interesante conocer como se está evaluando la accesibilidad real y la oportunidad de los servicios desde el Ministerio. Esta encuesta es la mirada del usuario, su percepción, un usuario “no inteligente” para tomar decisiones en salud, siendo esta una de las razones por las cuales tenemos EPS que fungen como compradores inteligentes de servicios para nosotros.

    Que los usuarios no pongan tutela no significa que exista acceso, tal vez hay casos de muchos que ya se cansaron de exigir un derecho que ni por tutela se cumple, conozco algunos casos así.

    El usuario nos muestra su “percepción de satisfacción” esto no habla de calidad de la atención, pues no es el idóneo para determinar la calidad técnica de su atención, la accesibilidad, oportunidad, pertinencia, seguridad y continuidad.

    Respetuosamente, Señor Ministro, creo que esta encuesta hay que complementarla y contrastarla con una evaluación sistemática y periódica de la calidad técnica de las EPS, fundamentada en criterios de habilitación técnica- operativa. Eso es una deuda que el sistema tiene con nosotros los usuarios, aunque no seamos “compradores inteligentes”.

  • Oscar Andrés
    2 marzo, 2015 at 2:53 pm

    ¿¿Dónde puedo encontrar los microdatos de la encuesta o los resultados por ciudades capitales??

  • ALVARO HERNAN PUENTES SUAREZ
    2 marzo, 2015 at 7:45 pm

    El asunto va más allá de la encuesta. Son los indicadores un punto el partida del análisis

  • Norberto Vera Reatiga
    3 marzo, 2015 at 4:58 am

    Un panorama sobre nuestro sistema de salud ya lo podemos observar en la bodega de datos del SISPRO, alli encontraremos respuestas basadas en hechos a nuestras preguntas sobre si estamos siendo atendidos o no, una bodega de datos abierta… solo eso se necesita para empezar a dudar de los sesgos producidos por los casos anecdoticos publicados por la simple necesidad de audiencia.

    Visitemos la pagina del SISPRO y vamos a encontrar buenas noticias sobre el acceso a la salud.

    Claro esas noticias positivas no venden dirán los medios…

  • Alejandro Gaviria
    5 marzo, 2015 at 12:45 am

    Adriana: no creo que el tema sea blanco y negro. Y tengo este blog precisamente para compartir opiniones y ayudar en la necesaria pedagogía pública. Saludos.

    • ADRIANA SEGURA VÁSQUEZ
      6 marzo, 2015 at 1:20 pm

      Lo sé. Si no, ni siquiera lo leería, Alejandro. Gracias por decirlo, sigo pensando que hace las cosas con rigurosidad aunque no estemos siempre de acuerdo.

  • Anónimo
    5 marzo, 2015 at 1:52 am

    Que los usuarios acceden sin tutela?????????….. Hay que ver los funcionarios de las EPS en las personerías, defensorias y demás instancias captando usuarios con intención de tutelar, para ahí si dar el acceso a lo que es POS o CTC a lo no POS. Eso es mejorar el indicador de manera reactiva no proactiva.

    Eso con los usuarios que deciden entutelar, ni que decir de quienes se resignan y no hacen nada, que es la gran mayoría

  • Dora Lucia Gaviria Noreña
    8 marzo, 2015 at 2:31 pm

    La evaluación del sistema de salud es un desafío ético, técnico y social. Si bien varias disciplinas nos permiten el análisis; como la estadística, la epidemiología, las ciencias sociales y de salud, debemos defender la vida y la salud como principio rector de calidad.
    De acuerdo con Luis Jorge, una muerte materna así sea un caso, nos obliga a reestructurar el sistema y a mejorarlo como ideal ético y colectivo.

  • guerrero
    16 marzo, 2015 at 7:15 pm

    Les recomiendo leer un punto de vista diferente:
    http://bit.ly/1Gvibo8

  • Alejandro Gaviria
    16 marzo, 2015 at 11:05 pm

    Enlazo el artículo recomendado por el comentarista anterior:
    El manejo de las estadísticas en el sector salud.

    Solo un comentario. Siempre he dudado de los argumentos que, invocando preceptos éticos, plantean que una sola muerte es inaceptable. Pues si una sola es inaceptable, dos, tres o cien lo son mucho más. De allí la necesidad de las estadísticas que, sin perder de vista los casos individuales, presenten una visión panorámica, utilitarista en el buen sentido. No es lo mismo el sufrimiento de un hombre que el de miles.

    Si nos atenemos al presupuesto de que una sola víctima es inaceptable, todos los sistemas de salud serían iguales (en todos hay víctimas) y perderíamos incluso el ímpetu para mejorarlos.

    Ni lógica ni éticamente me convence ese argumento.

  • Anónimo
    17 marzo, 2015 at 3:18 am

    Seria excelente utilizar la etnografía para averiguar cual es el impacto de la pésima red publica hospitalaria del país, por ejemplo en tiempos de respuesta es decir de oportunidad para la atención de los pacientes en todos los ámbitos de la atención en salud. Los monopolios privados permitidos por la supuesta libre competencia han hecho del sistema de salud público el mejor ejemplo de la perdida de la institucionalidad en beneficio unos pocos. El sistema de seguros o el mal llamado aseguramiento no es el problema, el problema de la débil influencia de la instituciones y la eficiencia de la política pública. Helio Caballero Rojas.

  • maria13R
    30 julio, 2015 at 4:58 pm

    Excelente Análisis.

  • Anónimo
    15 octubre, 2015 at 10:09 pm

    Señor Ministro el numero de personas que usted dicen que atienden habría que evaluar si las atienden oportunamente, por que parece ser que el que atendieron en Julio era por que le dieron la cita en Enero. Usted asume que el denominador de su ejercicio es correcto, pero las personas que usted dicen que atendieron tuvieron que esperar tiempos muy largos para recibir el servicio, entonces el atendido en Octubre seguramente pidió su cita desde Junio o Julio, entonces es falaz que la gente este siendo bien atendida. Solo lo invitamos a que salga del aula académica y vaya y mire las unidades de servicios para que vea como funciona. Debería ir a Saludcoop que esta intervenida por su gobierno para que ver como es la cosa alla.

  • Anónimo
    15 octubre, 2015 at 10:12 pm

    Es que el millón de personas que usted dice que atienden por día, debieron esperar meses antes de recibir el servicio…

  • Anónimo
    15 octubre, 2015 at 10:51 pm

    Entonces es falaz que el sistema de salud tenga buenas indicadores cuantitativos y cualitativos. Diga la verdad Señor Ministro el sistema de salud es un desastre.

  • Luís A. Daza C.
    16 octubre, 2015 at 4:18 am

    Apreciado Dr. Gaviria.

    Muy al lugar tu llamado a la razón, por más eficientes y con calidad que se hagan las cosas, siempre van a brillar los casos negativos.

    De alguna forma los medios transmiten solo una versión y una óptica de la realidad social, como tu bien mencionas, tanto los indicadores econométricos, estadísticos, epidemiológicos; y los derivados de la ciencia social (etnografía, grupos focales, triangulación), todos, son paradigma de una visión mas aproximada y más real del diario acontecer.

    Muchas gracias por dedicarle tiempo a tu interesante Blog, del cual soy seguidor.

    Abrazos.


    Luis A. Daza Castillo Enf. MSc.
    Magíster en Política Social – Pontificia Universidad Javeriana.
    Profesional de Enfermería – Universidad Nacional de Colombia
    Integrante Sociedad de Honor de Enfermería Sigma Theta Tau – Capítulo Upsilon Nu.

    Bogotá D.C. | Colombia
    [email protected]

  • Patricia Salazar Perdomo
    21 agosto, 2016 at 8:56 pm

    Ministro, infortunadamente, las buenas noticias no suele aumentar el "raiting" y por tanto la pauta publicitaria. Pata la muestra, dos botones: Noticias Caracol y Noticias RCN: muertes, violaciones, atracos, corrupción… Me molesto cuando llego a almorzar y los han sintonizado.
    No es que la situación o vida de una persona no importe pero desmoraliza que rara vez vean lo bueno.
    Su publicación es de hace más de un año pero es totalmente vigente. Lo mismo les ocurre al alcalde Peñalosa y al presidente Santos, si no es porque uno ingresa a sus cuentas, no se enteraría de todo lo bueno que hacen.
    Tenemos problemas, sí, pero los ataques, con frecuencia sin documentarse, no los solucionan.