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Desequilibrios sexuales

La semana pasada, el alcalde de un remoto pueblo australiano hizo un anuncio que causó hilaridad e indignación. Preocupado por la escasez de mujeres y por la consecuente desesperación de los lugareños, el alcalde invitó públicamente a las mujeres australianas sin muchos atributos físicos a acudir en masa a su pueblo en busca de la felicidad. “Con frecuencia –dijo el alcalde– uno encuentra una joven no muy atractiva sonriendo calle abajo. Vaya uno a saber si es por el recuerdo de un evento pasado o por la anticipación de la noche que viene”. Las mujeres del pueblo protestaron ruidosamente, con la indignación circunspecta de las agitadoras feministas. Algunos diarios editorializaron sobre el machismo sempiterno de los australianos, otros celebraron el asunto como una desviación cómica de la dictadura imperiosa de lo políticamente correcto.

Pero nadie se atrevió a señalar que la propuesta del alcalde llama la atención sobre un fenómeno inquietante: los desequilibrios en el mercado de parejas. En las grandes ciudades, el desequilibrio favorece a los hombres: las mujeres agraciadas y educadas abundan y los hombres con atributos deseables (las mujeres los prefieren ricos) son relativamente escasos. En las ciudades pequeñas o intermedias, la situación es la opuesta: las mujeres escasean y los hombres son tristemente redundantes. En Nueva York, según las cuentas del economista Tim Harford, el superávit de mujeres entre los 20 y los 34 años alcanza la asombrosa cifra de 500 mil almas (en pena). En los estados rurales de Alaska, Colorado y Utah, hay más hombres que mujeres. Mejor educadas, menos apegadas a la tradición y mejor preparadas para trabajar en los sectores más dinámicos de la economía, muchas mujeres van a las grandes ciudades en busca de una nueva vida. Muchas prefieren competir por un buen partido en la ciudad a casarse con el amigo de toda la vida que representa precisamente el mundo del que quieren escapar. Los hombres, por el contrario, son más reacios a emigrar a las grandes ciudades, donde, entre otras cosas, las habilidades típicamente masculinas son cada vez peor remuneradas.

Cuando abundan las mujeres atractivas y educadas, como sucede en Nueva York o en Bogotá para no ir tan lejos, la realidad comienza a parecerse a Sex and the city. Los hombres deseados sacan provecho de la abundancia de mujeres, de su escasez relativa. El ansia indiscriminada de los machos termina venciendo la pasividad discriminante de las hembras. Los hombres pueden conseguir lo que quieren sin promesas matrimoniales o grandes inversiones. Las mujeres viven en un continuo lamento por la falta de hombres desocupados o interesados en una relación seria. Los hombres sueltos no son serios y los serios no están sueltos. Así es la vida en las grandes ciudades.

Cuando abundan los hombres, las mujeres hacen de las suyas. Escogen y exigen con pasividad discriminante. Los compañeros de cama son convertidos, ipso facto, en socios de crianza. Las mujeres, entre tanto, ya no se quejan por la cantidad, sino por la calidad de sus compañeros del otro sexo. En el pueblo australiano, una mujer soltera le dijo a un periódico local: “Aquí no hay hombres que valgan la pena. Todos están muy ocupados tomando cerveza para mirar a las mujeres, lo único que hacen es gritar o silbar cuando uno pasa por su lado”.

No muchas mujeres acudirán al llamado del alcalde australiano. La mayoría prefiere la escasez de buenos partidos a la abundancia de malos prospectos. En todas partes, las mujeres jóvenes casi siempre dejan a los malos conocidos para ir en busca de los buenos por conocer.

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  • Alejandro Gaviria
    24 agosto, 2008 at 3:59 am

    Sobre el ansia indiscriminada de los machos y la pasión discriminante de las hembras (las mujeres enfatizan la calidad de sus compañeros sexuales; los hombres, la cantidad, dice los psicólogos darwinistas), vale la pena citar el resultado de un experimento, replicado miles de veces en las universidades gringas: 75% de los hombres están dispuestos a acostarse con una desconocida que los aborde a la salida de clase. El porcentaje de mujeres dispuestas a acostarse con un desconocido en las mismas circunstancias es 0%.

  • Anónimo
    24 agosto, 2008 at 5:12 am

    Muy buen articulo profesor Alejandro, muy al estilo de Levitt.
    Pero hay que resaltar que posiblemente en las ciudades pequeñas o intermedias en paises subdesarrollados, son pocas las mujeres con acceso a educacion, dado que hay muchas trampas de pobreza. El analisis de equilibrio en el mercado de parejas seria el mismo para un pais subdesarrolado y con diferencias tan marcadas en ciudades pequeñas (o municipios en este caso) que para un pais desarrolado? Ya que usted utilizo los casos de dos paises claramente desorrados como Australia y EEUU. (Me excuso por la tildes pues tengo el teclado desconfigurado)

  • Alejandro Gaviria
    24 agosto, 2008 at 11:16 am

    Anónimo: tiene razón. El análisis corresponde más a la situación de un país desarrollado. Pero las mujeres de las ciudades intermedias en Colombia también se van. Las jóvenes bonitas y talentosas de, por poner algún ejemplo, la zona cafetera, viven en Bogotá o en el exterior.

  • Gheysel Naranjo
    24 agosto, 2008 at 12:06 pm

    Mas allá de los desequilibrios físicos o sexuales, lo preocupante son los desequilibrios emocionales o mentales… ¿cómo se va a llegar a la evolución si sólo la mujer desea calidad?… calidad referida al plano físico, mental y emocional, donde difícilmente se encuentra con desconocidos en la salida de clases.
    Preguntas:
     ¿cómo utilizar las comunicaciones sofisticadas para unir mejor las parejas y almas en pena y la aceptación de la diversidad cultural entre ellas?
     ¿ cómo utilizar la ciencia para calcular la evolución sexual, emocional y mental, y sirvan de argumentos científicos para que las almas en penas la pongan en practica?
     ¿qué tanto funciona la fé de un hombre o una mujer en que le va a llegar, por arte de los dioses, su príncipe o su princesa? ¿es necesario ir a buscar la víctima, o la víctima te llega?
     ¿cómo maximizar la energía de atracción en lo productivo?
     ¿por qué no funcionan la mayoría de personas en lo emocional y en la convivencia? ¿no hay tolerancia al juego de poderes entre hombre y mujer?
     ¿Qué le falta a una pareja para que sea más exitosa? que le sobra?
     ¿ cómo armonizar el deseo interior con lo exterior y la realidad de una relación? ¿cómo impulsarlo?
     ¿como perdurar la atraccion y perdurar como el carbón encendido y no apagarse como cuando la gasolina se apaga y se prende en segundos?
     ¿ cuál es el espectáculo de que el hombre prefiera la cantidad? , acaso es el mismo fenómeno que sucede en la India del Gigante emergente? la cantidad de personas o victimas? E
     ¿ la curva de la felicidad total, que tanto contribuye la parte sexual?
    Ah, creo que las mujeres los prefieren dioses, es decir que estén en el top de lo físico, de lo emocional, de lo mental o intelectual… y esos si que escasean… definitivamente van más allá de los atributos físicos. Lo físico tan solo es “el sonar del timbre de la apertura…”

    gheysel.blogspot.com

  • Sergio I Prada
    24 agosto, 2008 at 12:58 pm

    Muy chevere el topico de esta semana Alejandro. Pienso que ademas de los razgos sicologicos que Ud menciona, en las grandes ciudades se dan dos fenomenos que aumentan el numero de mujeres bonitas «disponibles». 1) Las migraciones son selectivas. Entonces aquellas que vienen de otras regiones vienen «a triunfar» y rapidamente encuentran lo que los economistas tambien han demostrado, los bonitos o mas atractivos ganan mas o al menos reciben mas ofertas de trabajo. La decision es obvia, invertir mas en belleza. 2) Definitivamente el numero y disponibilidad de bienes y servicios (y tips de sus pares) para verse bonitas aumentan con el tamanho de la poblacion. El boom de spas y demas sitios especializados en belleza en ciudades intermedias y grandes, mas alla del tradicional salon creo que es una buena muestra de esto. Seria interesante ver cuanto gasta en promedio una mujer en belleza en ciudades de diferentes tamanhos controlando por precios.

  • Carlos
    24 agosto, 2008 at 2:12 pm

    alejandro: creo que el experimento en las universidades es una muestra del apetito sexual de universitarios, no necesariamente de todos los hombres.

    Con respecto al tema de la columna, Hartford, en su ultimo libro, menciona otros aspectos que tienen que ver con el fenomeno:

    Las mujeres se educan mas hoy en dia, porque ha aumentado la tasa de divocios y ya no pueden asumir un marido que las va a mantener toda la vida, y porque las labores domésticas son menos demandantes hoy en dia(gracias a las tecnologías), y por lo tanto, el papel de «ama de casa» ha sido reemplazado por el de «segunda fuente de ingresos»

    Finalmente me queda una inquietud:
    todo el análisis de Hartford y de Alejandro asume la racionalidad económica en un sentido amplio. Dado ese supuesto, podría esperarse que el mercado de busqueda de parejas se equilibré a medida que las mujeres descubran que sus posibilidades de casarse aumentarían si se mudan a los pueblos, y a medida que los hombres descubran que sus posibilidades de casarse aumentan si se educan mas y se mudan a las ciudades con un empleo mejor pagado?

    Se mantendrá y ahondará el desequilibrió causando a largo plazo un impacto demógrafico?

    ojo, que las implicaciones de este desequilibrio sexual van mas alla, de lo curiosidad que causa el acto del alcalde australiano

  • Maldoror
    24 agosto, 2008 at 3:46 pm

    Carlos:

    ¿Como ve ud la relación entre la busqueda de pareja y la demografía?

  • Anónimo
    24 agosto, 2008 at 3:48 pm

    En cuestión de matrimonios la cosa es bien complicada..

    “En todas partes, las mujeres jóvenes casi siempre dejan a los malos conocidos para ir en busca de los buenos por conocer”. Alejandro Gaviria

    “Mas vale pájaro en mano que cien volando” refrán popular

    “A los cinco años de matrimonio todos los hombres son la misma vaina” dice una prima con tres matrimonios a cuestas.

    Lelo69

  • Carlos
    24 agosto, 2008 at 3:57 pm

    Sergio: puede llevar a reducir el número de nuevos nacimientos, que de hecho ya esta ocurriendo incluso en paises de medianos ingresos como Colombia.

    Aunque muchas mujeres se le miden a adoptar o inseminarse artificialmente, criar un hijo solo es mas dificil y costoso en tiempo y obviamente en dinero.

    Una mujer sola por decisión propia, adoptará o se inseminará para 3,4 hijos? No creo que ni para dos.

    Las que he visto que lo hacen, es para uno solo.

    A su vez, cada vez el promedio de edad de las mujeres para casarse y/o tener hijos es mas alto, así que hay menos posibilidades de tener hijos.La fertilidad de las mujeres disminuye con la edad y prácticamente desaparece despues de los 45-50 años.

  • Carlos
    24 agosto, 2008 at 4:03 pm

    Supongo que esto es lo que no quieren los que buscan colectivizar/estatizar el agua.

  • juan francisco muñoz
    24 agosto, 2008 at 4:19 pm

    sería interesante un estudio que comparara empleo formal con conducta de selección de parejas sexuales. Ver si hay diferencia en ambas variables con respecto a hombres y mujeres. Yo pienso que tal vez el empleo formal genere posibilidades, para los hombres de ser indiscriminados, y para las mujeres de ser discriminantes. Qué pasará con hombres y mujeres sin empleo formal, acaso esta variable modificaría la tendencia esperada?

  • Tarantini
    24 agosto, 2008 at 4:42 pm

    Si el artículo anterior contra las políticas del gobierno generó escozor en Planeación, éste, generá para las y los feministas un ataque frontal. Esperemos la reacción.

    Hay un comentario de Alejandro que seguramente tendrá su soporte estadístico, por lo juicio que es él al lanzar algún juicio de valor, respaldandolo siempre en cifras y es áquel que dice, que los gringos en un 75% se acostarían con una desconocida si los abordase en la calle así sin más, y que 0% de las mujeres harían tal cosa con un hombre que las abordase de sopetón para esos fines.

    Ver para creer, la hipocresia americana (norteamericana) en esos aspectos es bien conocida. Solo basta pasar por páginas de contactos mujer busca hombre y anuncios por el estilo, y con que sorpresas nos encontramos. Una cosa es decir y otra es hacer. La hipocresia es descarada en todos los países y razas del mundo.

  • Maldoror
    24 agosto, 2008 at 5:04 pm

    Carlos:

    Podría ser, pero yo sospecho que los factores que inciden en la natalidad están ligados sobre todo a campañas de control de natalidad (ese fue el caso de Colombia despúes de los setenta). En otros paises (por ejemplo Francia) la tasa de natalidad ha vuelto a aumentar. EN otros la condicion de madre soltera no es un impedimento tan grave para que las mujeres tengan hijos (como en los paises escandinavos). Habrá que ver, pero ciertamente la cosa parece mas complicada y hay mas variables en juego de lo que se pensaría, pienso yo.

  • los nuevos
    24 agosto, 2008 at 8:23 pm

    interesante tema. Aunque no se si la racionalidad economica puede explicar las volteretas de gustos y disgustos, en el mercado de parejas.

    No faltaran aproximaciones psicologicas, estudios de conducta, personalidad, y valores???.

    Tengo algunas pregunticas:

    Mexico, Nueva York, Bogota, presentan un superavit de mujeres atractivas y educadas. ud dice que el guion se asemejaria al de the sex and the city. algunas cositas que parecen entreverse en algunas columnas suyas: «turismo sexual» consumo de cocaina y añado: «lesbianismo», se acrecenteran, o es solo suposicion.

    finalmente esta discusión es un tema de política pública, moral religiosa, o simplemente un asunto individual y gregario que caracteriza nuestros procesos de urbanización y modernización económica.

    Camilo.

  • Alejandro Gaviria
    24 agosto, 2008 at 11:46 pm

    Sergio P.: el economista Tim Harford menciona el caso de las mujeres negras en los Estados Unidos. Como los matrimonios interraciales siguen siendo raros y (en muchas ciudades) una proporción muy grande de hombres jóvenes de raza negra están en la cárcel, las mujeres negras enfrenten un mercado de parejas especialmente desequilibrado. Harford anota que este desequilibrio ha traído dos consecuencias: muy bajas tasas de matrimonio y un esfuerzo de las mujeres por educarse para competir. En ciudades como Medellín y Cali, donde muchos hombres jóvenes de estratos bajos han sido asesinados, uno encuentra una situación similar: mercados desequilibrados, muy altas de embarazo adolescente y hasta competencia mediante cirugías estéticas. Sería interesante estudiar si las tasas de homicidios y las de embarazo adolescente están correlacionadas espacialmente en las ciudades colombianas.

    Carlos: no creo que los desequilibrios mencionados en la columna vayan a desaparecer endógenamente. En mi opinión, la brecha en años de educación entre hombres y mujeres se seguirá ampliando, especialmente en las zonas deprimidas. Y la migración selectiva de mujeres continuará. Existe otro gran mercado de parejas bastante desequilibrado que puede tener consecuencias insospechadas: China. Como resultado de los abortos selectivos de mujeres, la abundancia relativa de hombres en China es bastante grande. Algunas analistas creen que esta situación traerá muchos problemas futuros, entre ellos altos niveles de violencia.

    Camilo: el caso de China muestra que este es un tema con implicaciones de política pública (ver, por ejemplo, un artículo del Banco Mundial sobre el tema). De otro lado, el sociólogo francés Pierre Bourdieu escribió un libro titulado El baile de los solteros sobre la migración a las ciudades de las campesinas francesas. El análisis de Bourdieu enfatiza no sólo los aspectos económicos, sino también los distintos referentes sociológicos de hombres y mujeres. “Las mujeres –dice Bourdieu– son el caballo de Troya del mundo urbano”. Pero lo interesante es que, a pesar de la diferencia de enfoque, las conclusiones de Bourdieu son similares a las presentadas en la columna.

  • Apelaez
    25 agosto, 2008 at 12:05 am

    ¿Y como hizo el economista Tim Hartford para medir lo «agraciadas» que son las mujeres en las grandes ciudades?

  • Alejandro Gaviria
    25 agosto, 2008 at 12:17 am

    Harford no habla tanto de “agraciadas” como de “educadas”. Pero supone que muchas de las mujeres jóvenes que deciden salir en busca de un buen partido son más “agraciadas” que el promedio. Los análisis económicos sobre el efecto de la apariencia física en los salarios están basados en fotografías clasificadas por estudiantes de pregrado.

  • Gheysel Naranjo
    25 agosto, 2008 at 1:31 am

    Si los hombres de ciudad prefieren la cantidad por qué son tan celosos?, lo peor que le puede pasar a una mujer cuando va a una fiesta es ir con un hombre celoso, que oso!! no se puede bailar con absolutamente nadie más. Ah, ¿Cuál sería la disposicion a pagar de un alma en pena para pasar a un alma en la gloria?

  • Anónimo
    25 agosto, 2008 at 3:53 am

    Usted trata un tema interesante, pero creo que al entrar en este terreno comete las ligerezas que él mismo criticaba hace ocho días, es decir, entra en «la especulación metafísica», en «las cuestiones no verificables empíricamente» y otras debilidades del debate no informado.

    Dice Alejandro Graviria: «Cuando abundan las mujeres atractivas y educadas, como sucede en Nueva York o en Bogotá para no ir tan lejos, la realidad comienza a parecerse a Sex and the city.»

    Las estadísticas pueden establecer sin ambigüedad el tamaño de las poblaciones de hombres y mujeres, discriminarlas por edad y nivel educativo pero no llegan tan lejos como para juzgar el atractivo de las mujeres (o el de los hombres pues el argumento también funciona en ese sentido). El profesor Gaviria sabrá que el atractivo es una variable muy subjetiva, tremendamente heterogénea -sobre todo en ciudades cosmopolitas- y aún caprichosamente dependiente del tiempo y las experiencias de cada individuo, cuestión bastante metafísica y difícil de medir o estimar, como para sacar conclusiones serias al respecto.

    Por otro lado, «las mujeres los prefieren ricos», «las habilidades típicamente masculinas» » Los hombres pueden conseguir lo que quieren sin promesas matrimoniales o grandes inversiones.» son estereotipos bastante burdos, denigrantes de los hombres (y me sorprende que los escriba alguien de quién recuerdo haber leído críticas sobre el cliché del hombre como depredador sexual). Por cierto la preocupación a la que se refería el alcalde de Mt Isa no era la escasez de mujeres de una noche (cosa que, hasta donde conozco, en Australia -aún en el outback- se resuelve fácilmente sin que la población masculina llegue a la desesperación). El testimonio (entre otros) de la mujer que dijo “Aquí no hay hombres que valgan la pena. Todos están muy ocupados tomando cerveza para mirar a las mujeres, lo único que hacen es gritar o silbar cuando uno pasa por su lado” sugiere que la urgencia, cualquiera que ésta sea, no es puramente fisiológica, ni los machos parecen doblegados por la escasez, ni las mujeres por la necesidad de socios de crianza.

    En últimas, profesor Gaviria, lo que quiero decir es que lo que hombres y mujeres buscan en una pareja, y la dinámica de formación de estas son asuntos complejos, afectados sí por la estadística de poblaciones más las necesidades fisiológicas y reproductivas, pero que no se reducen a esos factores ni a estereotipos o variables inmedibles. He formulado esta crítica asumiendo que sus columnas sobre cuestiones de género están concebidas para plantear debates serios y no como pasatiempos de fin de semana.

  • Maldoror
    25 agosto, 2008 at 8:03 am

    Anónimo 22:53:

    Buenos puntos.

    Lo otro que yo me preguntaba es como saben que ABUNDAN las mujeres «atractivas» y educadas en New York y Bogotá ¿Con que parametros determinan que «abundan»?

  • Gheysel Naranjo
    25 agosto, 2008 at 1:14 pm

    3…

    1) Los pueblos fantasmas desaparecen porque no hay dinámica de parejas , entonces de alguna forma el nivel de la dinámica de parejas es el motor de los mercados, las razones por las cuales hay consumo y, por consecuencia, no es que las mujeres agraciadas y educadas lleguen a las ciudades desarrolladas, lo que sí es, es que las parejas agraciadas y educadas hacen que un pueblo o ciudad se dinamice más. Veamos un ejemplo en Medellín, nace gente bastante atractiva, y eso es lo que le a permitido a la región dinamizarse mas, tener un empuje de competencia enorme y la visión de su gente es mas interesante. Veamos un caso extremo, en Chicó o en pasto, la gente no es tan atractiva y agraciada entonces el poder de mercado es débil. Conclusión puede haber una correlación entre poder sexual genera poder de mercados. Habrá que hacer un análisis juicioso al respecto

    2) Cuando la pareja de alguien lo satisface en lo físico (sexual y algo de lo económico), emocional y mental, no necesita ir en busca de los buenos por conocer… es feliz, ya es serio o seria… me da risa por ejemplo las parejas de los indígenas como los Kogui del parque Tayrona, una vez les pregunté que si eran felices, la respuesta de la mujer Kogui fue que los hacia sentir bastante unidos, satisfechos y con energía el dormir toda la noche abrazados en una hamaca… sin despegarse, y con esa satisfacción en el día ya nada los tentaba y si en cambio tenia mucha energía para hacer cada uno sus actividades.

    3) Lo otro que explica la abundancia de educadas y agraciadas es que la mujer cae por el oído y el hombre por los ojos. Es decir que la mujer es más emocional, en cambio el hombre sigue el instinto. Dice Eva Rey en su libro “Levantando Polvo”- pag 50: “Odiamos que en la primera cita nos hablen de dinero, de cuánto tienen, de cuánto ganan, de los carros y sus fincas…Por lo general eso nos suele sonar a mentira. El que tiene no lo pregona a los cuatro vientos. El que pregona es el que tiene… pero por lo general deudas. Ademas, cómo hablar de eso cuando llegamos al restaurante en taxi (donde está entonces su chofer y esa 4×4 de la que tanto presume? Y, ¿cómo presumir de eso cuando dividió la cuenta Y me tocó pagar a mí la mitad, no es dinero lo que le sobra?). No, señores, no queremos un rico, queremos un hombre inteligente que nos quiera. Claro que aquí tengo que ser sincera pues, si nos tocara un hombre así y encima rico, mucho mejor, pero como la mayoría de nosotras sabemos que eso no nos va a pasar más que en nuestros sueños, pues ya lo tenemos asumido y si no tienen tanto dinero no pasa nada. Así que ya ven que el no ser millonarios no debería restarles seguridad. No aspiramos a eso… pero por favor no se la den de algo que no son. Eso sí, también les voy adelantado ya mismo que, así sean ricos, tampoco nos gusta que presuman de ello cada cinco minutos., muestréennoslo en los detalles, pero no más. Recójanos en su supercoche, paguen la cuenta en el mejor restaurante, no miren el precio del vino… pero no presuman de ello, eso nos hace sentir que nos están comprando y, aunque así sea, no nos gusta sentir que lo saben…”

  • jaime ruiz
    25 agosto, 2008 at 10:58 pm

    Yo siempre soy muy crítico con los universitarios, pero no al punto de atribuirles un apetito sexual distinto al del resto de la población como hace Carlos.

    Por otra parte, la encuesta que da un 75 % de disponibilidad viril es sesgada: no es que ninguna mujer vaya a acostarse con el individuo que la llame en el corredor moviendo el dedo índice adelante y atrás con el puño cerrado, sino que ninguna declara estar dispuesta a hacerlo. Muchísimas lo harían si el «pretendiente» en cuestión fuera el doble de Robert Redford, Paul Newman o Richard Gere, mientras que muy pocos hombres estarían disponibles para una persona de apariencia desagradable.

    La cuestión también parece mal planteada: no es tanto la calidad como el sentido del encuentro sexual, no creo que haya muchos hombres que puestos a escoger entre 300 amantes a lo largo del año y sólo una pero muy atractiva optaran por la primera opción. Sencillamente, la mujer no está dispuesta a irse a la cama con el primero que se lo proponga porque para hacer eso podría hasta cobrar dinero, mientras que el hombre por lo general sí está más dispuesto. No le interesa la cantidad sino la «accesibilidad» inmediata de su posible compañera.

    En fin, la cuestión de la cantidad remite a la biología, la mujer no puede concebir a más de un hijo en un año (salvo partos múltiples), mientras que el hombre podría fecundar a varios cientos. Lo cual no quiere decir que necesariamente le interese, sino que tiene al respecto una respuesta automática.

  • jaime ruiz
    25 agosto, 2008 at 11:00 pm

    Aparte, las mujeres no van a ir a ese pueblo australiano porque tendrían que concebirse como feas, cosa bien jarta. La idea del alcalde es descortés e inepta.

    (Falta una preposición en la primera línea del post original.)

  • Alejandro Gaviria
    25 agosto, 2008 at 11:54 pm

    Anónimo 22:53: gracias por sus comentarios, muy interesantes. La columna hace un uso deliberado de los estereotipos. Eso es obvio. Pero muchos de los estereotipos mencionados no pueden desecharse tan fácilmente. La evidencia acopiada por los psicólogos evolutivos comprueba, más allá de cualquier duda razonable, el contenido empírico de afirmaciones como “las mujeres los prefieren ricos” y “los hombres las prefieren jóvenes”. Para darle un solo ejemplo de la sofisticación empírica de esta literatura, un investigador comprobó recientemente que las bailarinas exóticas que están en sus periodos fértiles reciben pagos hasta 30% mayores que el resto. En fin, los estereotipos muchas veces no están tan lejos de la verdad como suponen los cultores de lo políticamente correcto o del pensamiento complejo o del feminismo indignado. Claro que hay otros factores. Eso nadie lo niega. Pero la columna trata de usar cierto reduccionismo con el propósito de analizar un tema interesante.

    Pero insisto en un punto. Los estereotipos funcionan muchas veces. En economia los llamamos modelos.

  • Anónimo
    26 agosto, 2008 at 12:06 am

    «Robert Redford, Paul Newman o Richard Gere»

    jajajaja, este viejito esta tostao y desactualizao; ahi es donde se sabe en que epoca vive y por que tanto delirio…

  • Gheysel Naranjo
    26 agosto, 2008 at 4:33 am

    La práctica deportiva transforma esos desequilibrios gravitatorios, desequilibrios que obedecen a una ley superior a la física llamada magnetismo y derivadados del efecto de la polaridad del rey y la dama, cada uno con su campo de batalla de igual poderío como cual operan los lóbulos del cerebro , maquinaria perfecta activada por el chip masculino, y la otra mitad o chip femenino… En fin, los desequilibrios y la polaridad de un campo de batalla delas parejas es una ciencia importante de descubrir…

  • Anónimo
    26 agosto, 2008 at 5:39 am

    Pues me sorprende todavía más ahora, ayer a las 22:53 yo contemplé que (en el peor de los escenarios) su escrito podía ser desinformado y como usted dice reduccionista, pero no un ejercicio deliberado de legitimar estereotipos.

    Mi área no es la econonomía sino las ciencias experimentales, allí también usamos cotidianamente los modelos y la estadística pero no partimos de la preconcepción de que un modelo está más cerca o lejos de la realidad, aunque sea la creencia popular, sino que consideramos simultáneamente múltiples alternativas (modelos) hasta que el análisis de los datos nos permita discriminar claramente en favor de una tendencia, mientras tanto todas las hipótesis se valen.

    En fin, pero lo que yo venía a comentar es que el alcalde en cuestión parece haber creado la polémica con fines publicitarios, (al parecer él ya tiene otros antecedentes al respecto: ver enlace ). Como lo menciona una columnista en The Guardian la relación 5:1 es completamente inconsistente con los censos recientes y esto me lo confirma otra fuente que me facilitó el enlace a los datos específicos del Australian Bureau of Statistics (ABS) . Según ABS, en 2006 había 19.664 residentes en el área de Mt Isa de los cuales 52.6% eran hombres, ahora en la franja de edad 20-24 años los porcentajes eran 51.6% hombres a 48.4 de mujeres. En Australia se ven cosas llamativas en cuanto a la dinámica de parejas, cuando yo estudié en una ciudad pequeña de allá (aunque no en Queensland) ví montones de gente soltera en el rango de edades 25-35, tanto hombres como mujeres manifestando anhelar pareja a largo plazo, pero completamente descontentos con el mercado disponible. Aunque creo que en ese caso el asunto era más bien de incompatibilidad de expectativas sobre el futuro y sobre la pareja.

  • Anónimo
    26 agosto, 2008 at 5:51 am

    Bueno, parece que puse mal un par de enlaces del comentario 0:39, corrijo (espero).

    Noticia de la otra polémica del alcalde de Mt Isa.

    Columna en The Guardian.

    Datos ABS

  • Alejandro Gaviria
    26 agosto, 2008 at 12:17 pm

    Anónimo: El escrito es una columna de prensa que, por definición, no puede analizar empíricamente todas las alternativas relevantes. Yo no pretendo legitimar estereotipos. Simplemente digo que algunos de los estereotipos mencionados tienen sustento empírico, asunto que usted parece soslayar.

    Claramente el alcalde de Mt Isa estaba exagerando. Pero la resonancia que han tenido sus declaraciones muestra que el asunto en cuestión es interesante. Yo traté de hacer una síntesis humorística de una dimensión del problema. Pero insisto en lo mismo: algunas de las ideas expresadas en la columna tienen sustento empírico.

  • Maldoror
    26 agosto, 2008 at 12:48 pm

    Pero insisto en un punto. Los estereotipos funcionan muchas veces. En economia los llamamos modelos.

    Esta frase debería ir en todo libro de introducción a la economía y en todo libro sobre teoría de ciencias sociales y de historia de la ciencia….

  • Carlos
    26 agosto, 2008 at 3:56 pm

    Todo lo que dice Alejandro tiene sustento empírico y es referenciado por Hartford en su libro y otros autores.Existen varios estudios sobre ese tema al menos desde Becker y seguramente antes.

    Alejandro no esta dando opiniones sin fundamento.

  • Alejandro Gaviria
    26 agosto, 2008 at 4:43 pm

    Sergio: la frase también serviria como introducción a un manual de pensamiento de comoplejo, de aquellos que advierten desde el comienzo que todo depende de todo y vice versa.

  • Alejandro Gaviria
    26 agosto, 2008 at 11:37 pm

    La mezcla de las ciencias sociales y darwinismo sigue produciendo estudios políticamente incorrectos: Want to live a little longer? Get a second wife .

  • Alejandro Gaviria
    27 agosto, 2008 at 3:32 am

    Save the males. El feminismo vuelve a ser atacado desde adentro.

  • Maldoror
    27 agosto, 2008 at 6:44 am

    Alejandro:

    ¿Desde adentro? Al menos hubiera puesto un artículo de Camille Paglia o de las de ifeminist, que son más creibles en su rol de hacerse pasar por feministas, pero esa Kathleen Parker que cita no tiene mucho de eso que digamos (su articulo es simplemente una nostalgia conservadora por el estereotipo del hombre «bread winner» – protector y proveedor- con una tipica dosis de queja moralista derechista sobre el sexo casual en los campus universitarios). Wikipedia, por lo demás, la describe como una comentarista política conservadora, con un grado en literatura. Que sorpresa.

  • los nuevos
    27 agosto, 2008 at 3:17 pm

    el feminismo recibe contraataque. los hombres vuelven por sus fueros, acudimos en salvamento, politica publica para hombres y sobre todo jovenes, solteros, sin oportunidades. Habra politico que lidere su causa y se sume a su tragedia?

    camilo

  • Alejandro Gaviria
    27 agosto, 2008 at 10:57 pm

    Sergio: tiene razón. La crítica no es desde adentro, y el artículono es nada del otro mundo. Alguién me mandó el enlace y lo pegué sin haberlo leído con atención.

  • Gheysel Naranjo
    28 agosto, 2008 at 3:28 pm

    Bueno pero en el ajedrez mientras el rey se queda en su casa, la dama tiene toda la autoridad y todo el poder de comerse a todos (las finchas del otro bando) y va a donde quiere con su caballero andante, su secretario privado (alfil) que va de esquina en esquina rápidamente…
    En general todo tiene un límite, pero creo que el elixir de la vida, la potencia y el impulso del deporte está es en la respiración y la nutrición. El día de ayer conversaba con Chris Carmichael, el entrenador persobnal del 7 veces campeon del Tour de Francia, Lance Armstrong, y realmente su estrategia de programa de entrenamientos para campeones esta basada en crear potencia (fisica y mental) al deportista, potencia que se genera con una excelente nutricion, un buen sueño, mucha fruta y liquido y con algunas estadisticas mostradas que el que comienza haciendo el menor espuerzo es que al final mantiene mas potencia y logra mayor lengevidad, tanto que el propio Lance Armstrong sobrevivio al cancer.

  • Gheysel Naranjo
    28 agosto, 2008 at 3:43 pm

    Bueno, olvide enfatizar, el elixir de la vida está es en disfrutar el medio ambiente y el deporte

  • Anónimo
    29 agosto, 2008 at 2:32 am

    A Parker no se la debe descalificar porque sea conservadora o porque Gaviria haya publicado el link que «alguien le mandó» sin lerlo muy bien, sino por si lo que dice tiene sentido o no, y si se ajusta o no a la realidad, dentro del marco de la discusión que aquí se ha planteado. No creo que realmente la preocupación de ella sea el sexo casual en los campus universitarios.

  • Alejandro Gaviria
    29 agosto, 2008 at 12:54 pm

    Anónimo: yo creo que Parker tiene razón cuando llama la atención sobre cómo el feminismo ha exacerbado las crecientes vulnerabilidades masculinas (ver aquí). Pero también veo en su escrito una insinuación (que no comparto) sobre la degradación de los valores: el feminismo, en opinión de Parker, sería sólo un síntoma de un problema más general.

  • Maldoror
    29 agosto, 2008 at 2:11 pm

    Alejandro:

    ¿Cual era el link -«ver aquí»- que iba a poner?

  • Alejandro Gaviria
    29 agosto, 2008 at 2:54 pm

    Sergio: aquí está el link, corresponde a una columna que escribí hace un tiempo que cita una opinión interesante de la escritora Doris Lessing sobre el feminismo.

  • Maldoror
    29 agosto, 2008 at 3:33 pm

    Alejandro:

    En esa columna suya ud no habla de las vulnerabilidades másculinas (sólo usa la palabra en un comentario, y sólo para afirmar que han crecido) ¿Cuales son esas vulnerabilidades? ¿El cambio de rol?

  • Alejandro Gaviria
    29 agosto, 2008 at 3:57 pm

    Los hombres son muchos más propensos a la deserción escolar, les va peor en los sectores más dinámicos de la economía (los servicios, por ejemplo), han perdido más como resultado del marchitamiento de otros sectores (la industria, por ejemplo), son el grueso de las víctimas de la violencia, se suicidan con mayor frecuencia, etc.

  • Maldoror
    29 agosto, 2008 at 4:03 pm

    Alejandro:

    Pero que tiene que ver el feminismo con todo eso. Lo del abandono escolar, ¿no estará más relacionado con la carga que se le impone al hombre de ser proveedor, y por ende de buscar trabajo para sostenerse y sostener a la familia? Lo del sector servicios…no sé exactamente como es que les va a mejor a los hombres, ¿pero no será que las mujeres tienen mayor impacto en un mercado donde se utilizan para trabajos de secretaria, recepcionista telefonica o cargos intermedios en las oficinas? Lo de la industria…pues siendo la industria un espacio laboral dominado por hombres, es apenas obvio que los que pierdan cuando se marchita sean…hombres. Lo de la violencia, bueno, los hombres son los principales perpetradores de violencia, y no creo que la critica feminista al «macho» y a la construcción de la masculinidad sobre una caracaza de agresividad como lo ha promivido la cultura, tenga culpa alguna en eso.

  • Anónimo
    29 agosto, 2008 at 5:53 pm

    Tiene que ver, tiene que ver. Recientemente leí un estudio sobre la situación de la mujer en las zonas rurales de Nicaragua, en el que se analizaban varios indicadores, incluyendo educación y empleo. El panorama que pintaban las cifras era evidentemente favorable a las mujeres (salvo, y claramente, en las cifras de violencia doméstica), especialmente lo que concierne a educación secundaria y tasas de deserción escolar, y a la calidad del empleo (se notaba, por ejemplo, la preponderancia absoluta de la mujer en el sector servicios, así como en niveles medios y superiores de la administración pública rural). Sin embargo, la conclusión del estudio, preparado por personas muy comprometidas con la causa feminista, no tenían nada que ver con lo que mostraban las cifras. La conclusión es que había que seguir invirtiendo todos los recursos disponibles en las mujeres dada su opresión histórica,al tiempo que se ignoraban olímpicamente las tasas de deserción escolar de los varones, las cifras de consumo de alcohol a edades cada vez más tempranas e incluso la escasez de empleo agrícola en los niveles más básicos de esta actividad. Lo más irónico de todo es que con este tipo de conclusiones se estaban desconociendo todos los avances de medio siglo de labores de personas como las autoras del estudio en favor de la mujer.

  • Anónimo
    8 febrero, 2009 at 4:11 pm

    Buen articulo. Solo una pregunta. Cual es el link para encontrar mas detalles sobre el experimento mencionado (el de las universidades). Gracias